El retorno de... EL GAFE

Nada más tomar tierra para sus inmerecidas vacaciones, ya olía a chamusquina. Todos nos temíamos lo peor. El olor a azufre presagia la presencia del maligno...
Y, claro, el bellísimo entorno natural de La Palma, en Canarias,

ardía por los cuatro costados.

Ya van arrasadas más de 2000 hectáreas. ¡Qué desastre!

Dios quiera que no se le ocurra darse una vuelta por Doñana... a visitar a los amigos.