13 octubre 2011

Venganza consumada

La injusticia socialista se la tenía jurada al juez que osó criticar la ley de enjuiciamiento por violencia doméstica y sacar a la luz la existencia de multitud de denuncias falsas de mujeres para desacerse de sus maridos y quedarse con su patrimonio. Dos años de inhabilitación. Mientras tanto Garzón sigue de rositas por esos mundos de Dios y el faisán volando libre.


¿Y el Campeón? ¿Cuántas portadas sacará el País con filtraciones de este turbio asunto?

1 comentario:

Sigo por las ramas dijo...

Los cajones de GarZón están hechos con madera de ataud.