El Euro de madera

Puede resultar gracioso, simpático, incluso ingenioso, pero un euro de madera, por bonito que sea, siempre será un euro falso.
Es la imagen que mejor le cuadra a ZP: más falso que un euro de madera, sin valor ninguno.
Prometió hacer del Parlamento "el centro de la vida política" y ahora que todos reclaman que acuda a él para dar explicaciones por la ruina en la que nos ha metido, se agarra a sus habituales salvavidas nacionalistas para no acudir hasta el 10 de febrero, ¡dentro de un mes! Esto se llama cobardía.
Entre tanto acudirá, eso sí, a varios mítines, se asomará a su nueva página propagandista de internet, acudirá a lo mismo a TVE a Tengo una pregunta para usted... Se dejará el culo por cualquier cosa que le reporte propaganda, pero al Parlamento, a la sede de la Soberanía Nacional, nada. Hasta dentro de un mes. Así demuestra el respeto que le tiene a los ciudadanos que le pagan sus ocurrencias y su sueldo, y su aprecio a la Democracia: Ninguno. Todo teatro, falso.
A ver si mientras tanto ocurre algún milagro y aparece algún indicador que disminuya la imagen de ineptitud que se ha ganado a pulso, o algún melón del PP mete la pata y le da cancha a Pepiño y sus televisiones para poder desviar de nuevo la atención.
Lo dicho, mas falso que un Euro de madera. Y cobarde.